¿Cuál es la respuesta fundamental para el ser humano?
Las cuestiones son muchas. Parece que ha emergido una
definitiva y es sobre el sentido de la vida personal, individual. Más allá del
lugar en el Mundo, ahora, parece ser, tenemos tiempo para pensar en nosotros
mismos. ¿Seguro? En principio, parece que depende mucho más de la hora. Con
cuatro hijos, el tener tiempo para ser uno mismo es, cuando menos, un laberinto
dónde ya no es importante salir, encontrar la salida, lo más importante es
dinamitar el laberinto. Lo que siempre hemos llamado “afanes de la vida”,
ahogan nuestros deseos. No es postergar, es el maldito lio en el que nos hemos
metido. La conversación con la familia, la conversación en el trabajo, la
conversación social, … para ser uno mismo no ha habido más medios y nunca más
ruido, tiempo que dedicar a demostrar que uno es uno mismo, inspirado, creativo
y millenian de adopción.
Por eso buscamos respuestas, no preguntas. Respondemos, nos
pasamos media vida dando respuestas. Podemos responder a @realDonaldTrump o a @JLo,
nos contestan seres airados porque no somos capaces de defender a España de las
hordas de inmigrantes o por no tener a 245 en nuestra casa, por ser del Real
Madrid o no, porque nos gusta el color gris perla. Yo que sé. Cada vez que escribo,
mi marca personal zozobra.
Valga esto de introducción para dar nivel al Master. Y ahora
viene el post.
Gracias a todos los que habéis venido la cena. A los que habéis hecho lo posible por venir, se os debe una cerveza y a los que ya estáis de vuelta de tanto zafarrancho navideño, preparar la cartera, de pagar la primera caña NO os librar nadie